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El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha asegurado que no existen cifras negras en relación con los homicidios de candidatos. En una conferencia de prensa desde Palacio Nacional el 28 de mayo, afirmó: “no hay más violencia, hay más homicidios”, situando sus “otros datos” en el centro del debate sobre su impacto en la percepción de la realidad.

Desde 2023, México ha visto un aumento en la violencia contra candidatos, candidatas y sus allegados. Según Roberto Roldán, vocero del Colegio de México, el simple acto de postularse puede significar un riesgo de muerte. López Obrador sostiene que los homicidios fueron un tema cualitativo más que cuantitativo, argumentando que estos datos se reportan fielmente a las autoridades, a diferencia de secuestros y violaciones.

Durante el sexenio de la Cuarta Transformación (4T), la información gubernamental ha sido objeto de escrutinio por parte de organizaciones no gubernamentales, especialmente en términos de transparencia democrática. Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad señalan que el término “otros datos” se ha vuelto una herramienta para evitar la transparencia y la rendición de cuentas.
Comparaciones con la economía

El Institute Mises destaca que los economistas emplean métodos de análisis que dan relevancia a la información. Los economistas, según el instituto austriaco, deben considerar tanto aspectos teóricos como prácticos, integrando factores sociales y económicos para que los datos reflejen la realidad.

Especialistas sugieren que los modelos de datos y la información contextual deben enfocarse en mostrar aspectos clave y verificables de la realidad. De manera similar, los datos en el contexto político de México deben reflejar su impacto real.

Las declaraciones de López Obrador en la conferencia “mañanera” del 28 de mayo resaltaron su preferencia por usar el término “homicidios” en lugar de “violencia”. Usuarios de redes sociales criticaron esta semántica, acusando al presidente de minimizar la escalada de violencia al separar el homicidio de otras acciones violentas, subrayando así su insistencia en los “otros datos”.

Además, la transparencia de los homicidios con motivos electorales es una de las áreas problemáticas de los “otros datos” del presidente. Laboratorio Electoral monitorea los ataques contra familiares de candidatos, que podrían formar parte de las cifras negras. Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), la cifra negra incluye actos delictivos no reportados ni investigados por el Ministerio Público.